Tengo la suerte de que ahora mismo se lleva lo que a mí me gusta hacer, lo que no se es qué pasará cuando esta moda se vaya‘. Esas palabras se las oí hace poco a un diseñador hablando de estilos, personalidades y otras ideas recurrentes cuando cada temporada se plantean las tendencias de flamenca. Es habitual que, lo que viene como gusto mayoritario, a veces encaje con determinadas ideas y a veces no, pero cuando el viento sopla de frente, ¿Por qué no aprovecharlo?

Los hermanos Pedroche así lo han hecho: para celebrar el 15 aniversario de la firma se han valido de que estamos en plena euforia por el estampado, por los bordados y por las aplicaciones de carácter natural con las flores como principal apoyo. A partir de ahí viene una flamenca que se desgrana en diferentes formas con una colección que se podría catalogar como perfecta para el 2018 pues (casi) todos los diseños, se amoldan como un guante a lo que hemos visto, estamos viendo y queremos ver: volantes de capa, volúmenes generosos en faldas, talles altos muy estilizados, estampados cuidadosamente seleccionados, cuerpos que saben realzar la figura femenina, escotes marcados y estilismos recargados que no caen en lo kistch.

Caso aparte es la oda al rosa (la flor) y al rojo (el color) como hilo conductor de la propuesta, haciendo que cada traje brille por sí solo y que, a pesar de la espectacularidad de algunos diseños en particular, el conjunto en general no presente algún altibajo (o los llamados trajes de relleno). Toda esa pomposidad desplegada además no parece casual: está claro que aquí más es más, pero siempre de manera estudiada, con cuidado a la hora de escoger que debe aparecer y que no… A fin de cuentas la flamenca de Rosa Pedroche tiene un estilo que no conoce la discreción. Y la discreción, se lleve lo que se lleve en volantes, nunca pasará de moda. Ni aunque pasen otros 15 años.

En líneas generales: Rosa Pedroche celebra sus quince años en la moda rodeada de rosas (nunca mejor dicho) en casi todos sus diseños que completan a una flamenca, sensual, elegante y unos puntos barroco-chic de lo más atrayente. Y de paso realiza la respuesta perfecta a lo que Dolce&Gabbana realizó hace varias temporada y que muy pocos han sabido plantear y rematar del todo en flamenca. Responder a los italianos con su propia medicina ha sido una jugada maestra.

Destacamos: No cabe duda que esta colección le disputará a la de Ernesto Sillero el honor de ser la más copiada de este año.

Nuestra selección: nos quedamos con el traje negro con top de tul con bordados, el traje naranja con volantes en pico o el estampado de rosas a gran tamaño.

Rosa Pedroche tiene su atelier en Sevilla, Plaza del Salvador nº 2 (1ª planta).
Contacto: 651 17 63 46.
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