¿No os suena la situación de haberos presentado alguna vez a un examen, mirar las preguntas y pensar que eso no puede ser tan fácil, que tiene que haber trampa? Pues efectivamente, a veces la respuesta está delante nuestra, en nuestras narices, nos está tocando y no la vemos de primeras, por ello damos un rodeo y empezamos a divagar creyendo que, el moverse por las ramas, nos dará un mejor resultado que ir directos al grano.

Algo así es lo que puede sentirse viendo la nueva colección de Juan Boleco: en un momento crítico para la moda flamenca, en la que la creatividad se busca cual tabla de salvación que diferencie unos volantes de otros, aparece Boleco y demuestra que, quien sabe diseñar, hace petroleo con el agua. Para los rezagados: aquí el petroleo son los trajes y el agua es un muestrario de telas cualquiera que se pueda encontrar en cualquier tienda.

Él dice que con ‘Catarsis‘ ha querido expulsar todo lo llevaba dentro, y puede que los guiños a todas sus colecciones anteriores así lo atestigüen, pero en su nueva propuesta lo más interesante es ver como Juan Boleco, al igual que ya hiciese María de Gracia hace dos años, haga creer al público que está cambiando o rompiendo el discurso de la moda flamenca cuando la realidad es que solo le está aplicando conceptos nuevos a lo que ya conocemos. Fijarse bien en cada salida: son cuerpos entallados, faldas de volantes, mangas generosas en volumen o combinaciones de dos piezas de camisa y falda. La estructura, como tal es fiel al traje de flamenca, como también lo son los tejidos: casi todos ellos son de lunares o lisos con la presencia de algún estampado, ha prescindido esta vez de diseños o dibujos propios que empleó en otros años.

Pero es aquí donde está la clave: sobre ese esqueleto que invita a ir a lo fácil, Juan Boleco va aplicando un trabajo concienzudo, dando nuevas formas, estableciendo cortes que desdibujan con acierto las telas empleadas (la mayoría son las típicas de flamenca) y creando diseños completamente nuevos (hasta el punto de que se ha confundido media colección con estampados al uso) en la que la flamenca del diseñador renace y mantiene su estilo. Esto, señores, da un conjunto final que es un auténtico tratado de costura sin recurrir a efectismos, sin buscar que factores externos te hagan el traje, sin destrozar el patrón de un traje de flamenca y sin ser infiel a la filosofía que deben acompañar a los volantes.

Catarsis no es un imposible, ni tampoco una sucesión de trajes que se queden en pasarela. Es pura reinvención y modernización del discurso en el que la creatividad y el patronaje han confluido hasta darnos, una vez más, una de las claras colecciones de la temporada.

En líneas generales: Juan Boleco añade otra colección al capítulo de la modernidad aplicada a la moda flamenca. Todo ello siendo fiel al traje buscando, eso sí, formas nuevas de patronaje e incluyendo una carta de color que hace bastante atrayente el resultado final.

Destacamos: el uso del color y como el homenaje implícito a David Delfín nos ha regalado unos señores trajes de flamenca.

Nuestra selección: nos quedamos con el dos piezas de estampado de cuadros, el traje blanco de lunares o el turquesa con volantes de colores (y este es el traje de la temporada, ¿Vale?).

Puedes contactar con el diseñador por Facebook.
Juan Boleco tiene su atelier en C/ Monasterio nº 1, Palos de la Frontera.
Contacto: 638 92 12 63

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