Comenzábamos el año pasado su post individual destacando lo bien que Jonathan Sánchez ha evolucionado en su corta carrera como diseñador. Tanto en pasos a seguir como en formas de diseñar o atraer al público. La de Ventura es una carrera que podría calificarse de manual y en la que, por suerte, el público le acompañaba. El siguiente paso natural tampoco ha fallado: tras afianzar su estilo tomando como base el costumbrismo y el folclore flamenco del que procedía, la flamenca a Ventura le pedía una colección moderna en apariencia. O que al menos trasladase su estilo hacia un lenguaje más cosmopolita. Madera desde luego había: ya en ‘Mi Refugio’ intuimos que los palos podrían tirar por ahí. Para conocer más en profundidad la colección, os la mostramos a través de sus tres claves principales:
1 Formato in crescendo del desfile. Cuando las expectativas son altas, se espera que algo vaya desde el comienzo con el nivel que se le exige. En este caso Jonathan ha hecho un gran ejercicio de estrategia a la hora de plantear el desfile no agotando los cartuchos a la primera. Comienza fuerte con un primer diseño que deja claro que vamos a ver algo diferente, pero a ello le sigue una primera parte donde están los trajes, por llamarlos de alguna manera, más comerciales o más pensados para la venta tal cuál. Todos ellos en blanco y con el estampado que da imagen a la colección. A partir de ahí se marca una curva ascendente para ir poco a poco escalando hasta llegar a un final donde todo encaja y todo suma. No hay introducción-nudo-desenlace, pero si un clímax que va para arriba de manera constante.
2 Es una colección moderna pero sin olvidar de donde se viene. El juego y el valor principal de Resiliencia está en el trabajo sobre cuerpos y en como se han combinado los colores, dejando los volantes de las faldas y de las mangas con un aspecto formal que no despiste mucho al espectador y que mantenga la sintonía con su trabajo previo. A destacar ese punto de armadura que se ven en algunos trajes (o en los complementos de Samuel Ortega) y que potencian el lado femenino y con carácter que Ventura quiere para sus clientas en 2019. Porque estamos en un momento de empoderamiento femenino y la mujer quiere ser resiliente.
3 Todos los colores tienen cabida (y con coherencia). De pasteles a industriales pasando por tonalidades oscuras y poco convencionales. Es tal la fuerza y el protagonismo de los patrones que esa parte final más colorida se ve muy bien estructurada a pesar de lo dispersa que se visualiza la gama cromática. Ese cierre, además, deja entrever una faceta urbana y con ecos de pasarela internacional que no hacen otra cosa que confirmar que Ventura ha entendido que el lenguaje flamenco está en condiciones de ser más moda que nunca. Y esta colección, que es moda con todas las letras, no deja de ser perfecta para la Feria.
Nuestra selección: nos quedamos con el conjunto de rayas y lunares, el traje negro con volantes de colores y el asimétrico en tonos pastel.
Puedes contactar con el diseñador por teléfono en el 603680528 o a través de Facebook.
Ventura tiene su atelier en Bellavista (Sevilla), en C/ Almenas 6.
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